Contratos SAFE: Captación de Capital para Startups Simplificada
- Rizek Bichara
- 13 ene 2024
- 2 Min. de lectura
Iniciar una startup implica enfrentarse a varios retos, en particular en el área del financiamiento. Los contratos de inversión pueden resultar complejos, pero los contratos SAFE (Simple Agreement for Future Equity), en mi opinión, se destacan por su sencillez y practicidad. Estos han ganado popularidad en las startups por ofrecer una alternativa de financiamiento que se diferencia de los métodos tradicionales, alineándose bien con las necesidades de las empresas nuevas.
Desarrollados por Y Combinator en 2013, los contratos SAFE nacieron de la necesidad de un proceso de inversión más amigable. Son acuerdos que permiten a los inversionistas aportar capital a una startup, y a cambio, reciben derechos para convertir ese capital en acciones de la empresa en un futuro. Esto suele ocurrir en la próxima ronda significativa de financiamiento o cuando sucede un evento específico, como la venta de la empresa. Su simplicidad se destaca en comparación con otros instrumentos como los “convertible notes”, ya que los contratos SAFE no tienen fecha de vencimiento ni acumulan intereses, reduciendo la complejidad y aumentando la flexibilidad para ambas partes involucradas.
Una ventaja clave de los contratos SAFE es que son cortos. Son documentos breves y directos, diseñados para ser comprendidos sin necesidad de amplios conocimientos legales, lo que disminuye las posibilidades de malentendidos y, por lo tanto, de litigios. Esta simplicidad también agiliza el proceso de cierre de rondas de financiamiento, un aspecto importantísimo para startups que buscan capital de manera urgente para expandir su negocio. Además, los contratos SAFE tienden a ser más económicos en términos de negociación y redacción legal, lo que representa un ahorro para startups que usualmente operan con presupuestos limitados.
Otro aspecto beneficioso de los contratos SAFE es su flexibilidad. Al no crear una deuda inmediata en la startup, ofrecen un respiro para las empresas que todavía están en la fase de desarrollar su modelo de negocio y no generan ingresos significativos. La ausencia de una fecha de vencimiento proporciona a los empresarios un mayor margen para centrarse en el crecimiento y desarrollo de su startup sin la presión de cumplir con plazos de pago.
Comparados con las notas convertibles, los contratos SAFE son especialmente valiosos para las inversiones en etapas tempranas, ofreciendo una estructura clara y sencilla que beneficia tanto a inversionistas como a fundadores. Por ejemplo, cuando una startup opta por un contrato SAFE en lugar de un “convertible note”, se observa una gestión más fluida de la inversión, con menos complicaciones legales y mayor claridad y transparencia para todas las partes involucradas.
Es indispensable que tanto los empresarios como los inversionistas comprendan bien los términos de un contrato SAFE y cómo estos se ajustan a las necesidades y objetivos específicos de la startup. Aunque se caracterizan por su simplicidad, cada contrato SAFE puede tener sus particularidades, y es importante que se evalúen detalladamente para asegurarse de que se alinean con las expectativas y planes de ambas partes.
Los contratos SAFE han introducido un cambio significativo en la forma en que las startups y los inversionistas manejan el financiamiento. Su simplicidad, combinada con su flexibilidad y eficiencia, los hace una opción muy atractiva para las startups. Facilitan bastante el proceso de financiamiento, beneficiando tanto a empresarios como a inversionistas, y permiten a las startups centrarse en lo que realmente importa: crecer en sus respectivos mercados.
Rizek Bichara